La semana pasada la clase fue al Sacromonte para mirar a las cuevas. En el primer cueva había una vista impressionable de toda la ciudad. En este momento lo se invocó una sensación de nostalgia de mi vida aquí en Granada que se acercaba el final. Disfrutamos, con la vista, una tapa tradicional de pan, queso, jamón serano, y el alimento básico de aceite de oliva.
Las cuevas tenían un ambiente terrenal con las paredes naturales. Era fácil ver la belleza en el azulejo que cubría todo del baño. Me parece ser más una vida más simple y apreciada. Del arte a la decoración que había un estilo distinto en las cuevas.
Tuvimos el oportunidad hablar con residentes de este zona sobre una tema controvertido sobre la policía en el Sacromonte esa mañana. La policía llegó a algunas cuevas para dicer que las cuevas, sus casas, no son seguridad y tiene la posibilidad derrumbe. Esta interacción se despertó polémica. Los vecinos dicen que hay una agenda político oculta. Una teoría es que la cuidad quiere comercializar esta zona. Posible hay planos de construcción para un hotel. Para este razón las personas tener desconfianza de las intenciones de la cuidad. Uno de los propietarios que hablé dijo que cambiaría la atmósfera de Sacromonte. Las personas tienen manera de vida que ellos están acostumbrados. La vida está tranquilla y la zona tiene una comunidad.
Porque esta zona tiene un sentimiento fuerte de comunidad esta situación ha creado desacuerdo. Un grupo de activistas, Stop Desahucios, ha hecho esfuerzos contra la destrucción de las residencias. También un grupo se llama Abogados en Red tener un desacuerdo con las acciones y quiere ayudar las personas de Sacromonte.
Deja una respuesta